Reto La Magia del Orden: introducción

Seguramente estaréis pensando que estáis en un déjà vu, ¡pero no! He decidido volver a empezar el reto de La Magia del Orden, pero esta vez haciéndolo bien (porque el del año pasado acabó quedando a medias...). Esta vez no volverá a pasar, porque por primera vez (y espero que no sea la última) me he planificado todos los posts que va a tener la serie.

Mi intención es hacer el reto en 6 posts+2. Es decir, el primero (que es este) con la introducción, los seis siguientes dedicados a cada categoría que establece Marie Kondo, y un último post de conclusiones y resultados.

Así, el contenido de la serie será el siguiente:

1. Introducción

2. Ropa

3. Libros

4. Papeleo

5. Varios (Komono 1)

6. Varios (Komono 2)

7. Objetos sentimentales

8. Conclusiones

En cada post os haré un breve resumen de lo que dice el libro y cómo lo he ido aplicando yo a mis cosas. Este libro da consejos pero no a todo el mundo tiene porque funcionarles. A lo mejor algo que a vosotras os ha servido mucho a mí no me sirve para nada, o viceversa.

La chicha del reto la he hecho en 6 partes porque Marie Kondo dice que una organización rápida se haría en medio año, y cómo hay 6 categorías de objetos dedicaré un día de cada mes a este reto.

Como ya hice un post introductorio al reto, quizá muchas de las cosas que os digo os suenan (y si ya habéis leído el libro os sonarán seguro).

Marie Kondo es una japonesa obsesionada con el orden desde pequeña. En el libro cuenta que a los 5 años ya leía revistas de decoración e intentaba aplicar todos los consejos sobre organización a su casa. Probó muchísimos métodos pero ninguno le funcionaba, debido a una serie de errores que cometemos la mayoría de la gente sin darnos cuenta, derivados de estos factores:

- Nadie nos enseña a ser organizados: ya desde pequeños nos regañan por no tener ordenada la habitación, pero nadie nos enseña cómo hay que hacerlo.

- Usar métodos erróneos: como el de tirar un objeto al día (al final te acabas olvidando, y el día que sales de compras acaban entrando más cosas de las que salen) o tirar algo que hace un año que no usamos (yo aplico bastante este criterio...).

- Almacenar sin desechar: el almacenamiento no resuelve el problema del desorden. La organización tiene que empezar por la eliminación y continuar por el almacenamiento.

- Organizar por ubicación: cuando nos ponemos a ordenar decimos: hoy toca el mueble de la televisión, en vez de decir: hoy toca organizar los libros. Y de ahí también deriva el error de guardar el mismo tipo de cosas en diferentes lugares de la casa, lo ideal sería tenerlo todo agrupado, porque así nunca sabremos el volumen total y no acabaremos nunca (¡¡yo por ejemplo tengo libros repartidos por toda la casa!!)

- Ordenar un poco cada día: eso solo nos provocará frustración porque no acabaremos nunca y siempre habrá desorden. Y de aquí sale el principio de La Magia del Orden: la organización debe hacerse de una sola vez.

Y para hacer la tarea más fácil, Marie Kondo nos da algunos consejos:

- Antes de ponernos a tirar cosas debemos visualizar un objetivo, ¿qué queremos alcanzar mediante la organización? Tiene que ser un objetivo concreto, como por ejemplo tener un piso tan ordenado como una habitación de hotel. Si no sabemos precisar tanto, podemos mirar revistas de decoración para inspirarnos.

- Elegir lo que queremos quedarnos, no lo que no queremos.

- Empezar decidiendo qué queremos organizar. Buscar por toda la casa los objetos que pertenezcan a esa categoría y juntarlo todo en un mismo sitio para tener una idea del volumen de cosas que tenemos.

- No dejar que los otros miembros de la familia vean lo que descartamos porque lo van a querer recuperar y al final acabaremos teniendo el mismo volumen de objetos, solo que pertenecerán a personas distintas. Y tampoco regalarles todo lo que no queremos, darles solo lo que realmente les pueda gustar.

- Organizar sin distracciones: ni música ni televisión. Tenemos que estar concentrados.

- Evitar pensar "podría necesitarlo algún día", porque así no avanzaremos.

Resumiendo, las claves del método son dos:

Organizar por categorías

Conservar solo lo que nos haga felices

Y después de esta pequeña introducción, vuestra tarea principal es la de imaginar el objetivo que queréis conseguir organizando.

¿Os animáis a seguir el reto conmigo? ¡Venga! Que no es tan complicado :)

¡Que tengáis una feliz semana!

¡Hasta el viernes!